22 de mayo de 2013

Planos vacíos

"Esa extraña sensacion que te recorre cuando te cruzas con tu otro yo, con quien tanto compartiste y la percepción de vacío porque ya no tienes nada que decirle al verle, no puede dejar indiferente..."

Todo quedó dicho, nada que decir....
 
 
 
Siempre quedan unos instantes para reencontrarse con el recuerdo,
de las desagradecidas ausencias.
Aquéllas con las que malgastamos nuestras
tantas buenas noches...
 
Y porque seguimos desmelenándonos a diario,
con los duelos incansables de titanes:
Recuerdos versus Olvidos.
 
Bregamos con indeseables compañías,
de enemigos íntimos,
de inevitables, imposibles, inviables
compañeros...
 
Y estas constantes presencias de ausencias,
abrumadoras, tormentosas, eternas...
esa condena que mata lentamente....
 
Permaneciendo como malabaristas de estampas,
prestidigitadores de sensaciones,
domadores de sonidos,
equilibristas de sabores...
 
Permanecen las estrategias del cortejo.
Del cortejo meticulosamente sórdido,
delicadamente calculado,
descaradamente diseñado,
ordenando las visitas al harén.
 
Protocolo de atenciones,
búsqueda de sumisiones,
itinerario de rutas preestablecidas,
fríamente escogidas,
aburridamente repetitivas...
 
Vinos, noches, vistas, flores...
 
Y siguen las muñecas de escaparate
paseándose descaradamente,
escondiéndose concienzudamente,
por el pretil de la azotea.
 
Abriendo ventanas,
cerrando puertas,
desgraciadamente insensato este ritmo de vivir,
tirando por la borda lo valioso de la permanencia,
de la eternidad,
persiguiendo la nada...
 
Insensible alexitímia destructora,
que impide amar
y señala mártires...
 
Reinicio de vanas intenciones,
inagotablemente, desasosegadamente...
Versos sueltos sin escrúpulos.
Nauseas.
 
Inédito para Fresas en noviembre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario