6 de junio de 2011

Una decisión inexcusable



"El PSOE ha sido el partido de la renovación política, del progreso, el partido que protagonizó el cambio más importante en la España de este siglo. El partido que incorporó este país a la escena internacional, que articuló un proyecto muy sólido de Estado autonómico y solidario, que contribuyó decisivamente a sentar las bases de la convivencia entre los españoles, superando viejos dilemas históricos y ofreciendo un modelo de cohesión social. A la vista de los últimos resultados, es evidente que ese partido debe hoy revisar su modelo, su estructura y su proyecto político".

Son días de reflexión y de toma de decisiones. Momentos en los que los dirigentes que nos representan deberían de aparcar sus intereses personales y ser generosos con el partido bajo el que se han movido en los últimos años porque los resultados por unos u otros motivos no han sido muy halagüeños.  He retomado un párrafo, con el que empiezo este post, que por muy actual que parezca, no es de hoy. Es el fragmento de un artículo, muy interesante por cierto; que firmaba para El País, en el año 2000 la ahora Ministra Trinidad Jiménez, y al que podéis acceder pinchando aquí. Es un artículo realmente cargado de preguntas con un hondo calado político. ¿Qué esperan los ciudadanos? ¿Seguiremos haciendo oídos sordos a los gritos de la calle? ¿Por qué en los grandes partidos políticos, los dirigentes se anquilosan en el poder impidiendo abrir las puertas y ventanas para que realmente entre el aire fresco y la renovación? ¿No han sido suficientes los resultados de las urnas para ser responsables y coherentes con la situación que tenemos ante un muy cercano horizonte?

Tenemos una oportunidad de lujo para sentar en el banquillo de la oposición de la Diputación a un elenco de nuevos valores socialistas, para que se curtan y se hagan a la plaza, a jóvenes de nuestras localidades gaditanas que pueden trabajar por recuperar el pulso socialista perdido en el Palacio. Pero quizá eso, para algunos signifique un gesto de generosidad desmedida que no están dispuestos a permitir. O quizá, lo piensen y estén barajando dar una grata sorpresa: dar un paso a un lado y brindar la oportunidad de fajarse a otros. Porque otra ocasión, no se presentará hasta dentro de otros cuatro años. Pero claro, eso sería decidir por el PSOE, en vez de por cada uno de ellos y ellas mismos y sus intereses;  y a que se tomen esas opciones no estamos acostumbrados. Porque un cambio es necesario, pero ahora sobre todo, es muy oportuno.

Hacen falta reflexión, voluntad y toma de conciencia en relación al afrontamiento del contexto de crisis económica, de valores y de votos que sufrimos. El desapego a la política por la ciudadanía se debe, en gran medida, a la actitud y los comportamientos públicos de nuestros representantes. Un gesto que favoreciese una transición tranquila, el cambio eficaz y visible, aportaría con seguridad esa devolución de la credibilidad perdida en el partido socialista. La victoria indiscutible hubiera potenciado la autoridad y el mantenimiento en las responsabilidades desempeñadas a sus artífices. Sin embargo, la derrota evidencia que para no arruinar otra vez, la historia de este centenario partido, el cambio de formas, de ideas y de imagen es fundamental y hoy sólo unos cuantos tienen la decisión en las palmas de sus manos, ignoro si también en sus corazones.









1 comentario:

  1. De acuerdo en lo fundamental. Lo inmediato en Cádiz es intentar influir en la composición del Grupo socialista en la Diputación y, sobre todo, que las nuevas políticas no lleguen a la ciudadanía mediante la cara del principal responsable del naufragio del PSOE de Cádiz.

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