Cuando la inspiración viene sola, llama el insomnio a la puerta: el deseo de crear obliga. Transfigurarse en la experiencia de atrapar el verso y la idea es un acto de placer, dolor y trabajo. Así es la poesía, quién la ha sentido, disfrutado o sufrido, lo sabe. Éxtasis onírico y lírico que me fecunda. Recrear por los cuatro costados es vital para seguir despierta.
Asi esta mejor,Blanca,con paraguas(ya esta esta cayendo una...Uf..¿verdad?):Yo me he pillado también un chubasquero(rojo,evidentemente)...pero me sigue encantando salir a pasear cuando llueve (a ciertas edades uno ya no cambia,ni quiere cambiar).
No te olvides del paraguad(hay quienes lo llevan hasta con el sol fuera)
ResponderEliminarAsi esta mejor,Blanca,con paraguas(ya esta esta cayendo una...Uf..¿verdad?):Yo me he pillado también un chubasquero(rojo,evidentemente)...pero me sigue encantando salir a pasear cuando llueve (a ciertas edades uno ya no cambia,ni quiere cambiar).
ResponderEliminarSaludos,compañera.