La ética del político.

Hoy, como cada fin de semana disfruto con la prensa dominical. Los fines de semana los periodistas se afanan por ofrecer sus artículos con más enjundia, ya que son conocedores de que es cuando más se les lee. Los asuntos políticos, últimamente parecen que recuperan un interés inusitado. De hecho, los politicos aparecían en un lugar destacado en los últimos rankings de encuestas como problema para los españoles. 

¿A qué se debe la falta de credibilidad y el desapego a las cuestiones comunes?

Y para mi reflexión voy a emplear un artículo que publica mi profesor y compañero Jaime Martínez hoy en Diario de Cádiz en relación a la ética del docente y que me viene de perlas para abundar en mi exposición.

" ¿En qué consiste la ética del docente? Sinceramente, creo que en su compromiso con el aprendizaje. Si éste no se produce, el que tiene una conciencia profesional desarrollada busca, cambia, aprende nuevos métodos con el fin de mejorar su actuación. El que la tiene menos, le echa la culpa al niño, a la familia, a la Administración, a los políticos, a la sociedad, al sistema, a la Logse, a la globalización y ... a los pedagogos".

En la política sucede algo parecido. Hay políticos y políticos. Los que entienden la política como profesión y medio de vida para satisfacer necesidades personales por encima de la responsabilidad y el compromiso y los que la tienen como vocación de servicio, causa de bien común, desarrollo y progreso. Desgraciadamente los primeros en connivencia con el desapego a los valores de la ciudadanía en general, han posibilitado, en parte, la situación actual que nos ha tocado vivir. Esa indiferencia ha fortalecido prácticas totalitarias en el seno de los partidos políticos impidiendo una democracia real, anteponiendo los territorialismos y las cuotas de poder al mérito, a la capacidad, a la reflexión, la propuesta y el trabajo. Es el momento de la llamada a la conciencia profesional desarrollada para que busque los nuevos métodos que mejoren las actuaciones políticas, (en mi anterior post recordaba la máxima einsteniana), porque la ciudadanía en tiempos de crisis vuelve a mirar a los ojos a aquellos que nos representan. Entre unos y otros tendremos que ofrecer la solución, esa que con tanta crisis es tan necesaria.

Quizá por eso el nuevo Secretario General del PSOE-A está generando cambios, para ganar el futuro. Primero los orgánicos y ahora los institucionales. Confiamos en que irán saliendo los mejores. Hoy en prensa, para Diario de Cádiz, Marqués Perales.

¿En que consiste la ética del político? En el cumplimiento de su compromiso con la ciudadanía y hay que renovarse para ganar.